Los pisos ocupados ilegalmente por gente que causa problemas de convivencia con los vecinos continúan siendo de las preocupaciones más grandes del Ayuntamiento de Olot en materia de seguridad. Así lo afirmó el alcalde, Pep Berga, al final de la junta local de Seguridad (órgano que reúne los cuerpos policiales y sus responsables políticos) celebrada ayer. En total, a la ciudad constan 164 pisos que estan ocupados de manera ilegal, pero son 54 los que suponen un problema de conviviencia. "Crean inquietud y alarma social; tenemos que actuar con la máxima contundencia posible", afirmó el alcalde, que remarcó que estos inmuebles no estan repartidos por la ciudad, sino que se concentran en tres puntos concretos. Esta circunstancia, según indicó, "permite ser más efectivos a la hora de abordarlo, a la hora de presionar estas personas". Según dijo, la situación (que se arrastra desde hace años), poco a poco va mejorando.
Las cookies técnicas son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría sólo incluye cookies que garantizan las funciones básicas y funciones de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan información personal alguna.
