El servicio de mediación de la Oficina Municipal d'Habitatge de Girona tiene abiertos 200 casos. Eso quiere decir que trabaja porque familias vulnerables no sean víctimas de un desahucio o bien para negocionar con grandes tenedores que les faciliten un alquiler. El servicio de mediación funciona desde 2012 y ha tratado hasta 500 casos.
El técnico municipal del servicio de mediación en vivienda, el abogado Ferran Ribas, cuenta que al principio la mediación tenía mucho que ver con impagos de hipotecas. Ahora, en cambio, los casos se han ampliado con "ocupaciones, impagos del alquiler y resolución de la extinción de un alquiler [para buscar una alternativa", explica.