Hace unas semanas, el Congreso aprobó la ley de vivienda con el apoyo del PSOE, Unidas Podemos, ERC y EH Bildu. La ley establece limitaciones en las subidas de precios de los alquileres existentes y permite a las comunidades autónomas declarar zonas de mercado tenso para controlar los precios de los nuevos contratos de alquiler. También redefine el concepto de gran tenedor e introduce un índice de referencia para los precios del alquiler.
Sin embargo, esta normativa ha generado críticas por parte de los administradores de fincas y los agentes inmobiliarios, que consideran que afecta negativamente los pequeños propietarios y no aborda adecuadamente el problema del acceso a la vivienda.
