El Ayuntamiento de Girona ha aprobado un límite del 4% de pisos turísticos en la ciudad, con votos a favor de los grupos del gobierno (Ganamos, Juntos y ERC), Vox se ha abstenido, mientras que el PSC y el PP han votado en contra. El PSC quería posponer la decisión para un pleno extraordinario, pero el gobierno argumentó la prisa debido al acabado de las suspensiones de licencias.
La teniente de alcaldía, Cristina Andreu, defiende la medida para preservar la vivienda y evitar pérdidas a favor de usos no residenciales, todo y subrayando la necesidad de más políticas de vivienda social. Actualmente, hay unos 800 pisos turísticos en la ciudad, sobre todo en el Barrio Viejo y al Mercadal, y la limitación del 4% es vista como un crecimiento moderado y sostenible.
El PSC no está de acuerdo con la medida y la considera una acción superficial que no mejorará la convivencia ciudadana, y sugiere una limitación más específica por sectores como el Barrio Viejo.
El PP lamenta la imposición del límite y cree que no se ha consultado bastante con el sector turístico, considerando que se ha criminalizado.
Vox no ha revelado su posición. En resumen, la decisión ha generado controversia y debate, con diferentes opiniones sobre su eficacia y consulta con los actores afectados.
