El Ayuntamiento de Girona y la Generalitat han unido fuerzas para intensificar la persecución de las viviendas de uso turístico que operan sin licencia. En una reunión reciente entre representantes de las dos administraciones, se acordó una colaboración más estrecha para compartir información que permita detectar y hacer cesar la actividad de los alojamientos ilegales.
La teniente de alcaldía y regidora de Transición Ecológica y Transformación Urbana, Cristina Andreu, y el regidor de Urbanismo de Proximidad, Lluís Martí, destacaron la importancia de cumplir con la normativa vigente y la necesidad de actuar contra la competencia desleal y las actividades ilegales.
El Ayuntamiento ha estado trabajando en la recopilación de datos sobre la presencia de viviendas de uso turístico ilegales, elaborando un censo que ahora pondrá a disposición de la Generalitat. Estos datos ayudarán a ser más efectivos en la erradicación de actividades fraudulentas.
Joan Martí, director de servicios territoriales de Empresa y Trabajo, recordó que la Generalitat ya hace inspecciones para detectar y cesar la actividad de los pisos turísticos sin licencia. Con la información proporcionada por el Ayuntamiento, se espera mejorar la efectividad de estas acciones.
Actualmente, la concesión de nuevas licencias de HUT está parada según el Decreto Ley 3/2023. Antes de esta parada, el Ayuntamiento ya había establecido un límite del 15% de HUT en el Barrio Viejo y del 4% al conjunto de la ciudad, para evitar el incremento de pisos turísticos en las zonas más tensiones.
La prioridad del Ayuntamiento es que el máximo número posible de viviendas esté disponible para los residentes de Girona, promoviendo así un uso residencial por encima del uso turístico.
