El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, ha anunciado una ayuda de 200 millones de euros destinado a los jóvenes en forma de bonos de alquiler, con el objetivo de combatir la subida de los precios del alquiler. Durante un acto celebrado en Barcelona, Sánchez ha reafirmado que la vivienda es una "prioridad absoluta" para su gobierno, y ha anunciado también que se está trabajando en un nuevo reglamento para evitar fraudes en contratos de alojamiento turístico y de temporada.
El Consejo de Ministros tiene previsto aprobar estas medidas hoy, tal como ha confirmó ayer la ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez. Además, Sánchez ha hecho un llamamiento a las administraciones autonómicas y locales para que apliquen la Ley de Vivienda recientemente aprobada, y ha destacado que la próxima conferencia de presidentes autonómicos en diciembre estará centrada en esta cuestión.
En relación con los bonos de alquiler para jóvenes, los requisitos principales incluyen tener entre 18 y 35 años, estar trabajando y no superar unos ingresos anuales de 24.000 euros. Las comunidades autónomas son las encargadas de gestionar estas ayudas, puesto que la competencia en materia de vivienda está transferida.
Sin embargo, la medida ha sido criticada por varios sectores. La vicepresidenta del gobierno, Yolanda Díaz, ha sido una de las primeras al expresar su disconformidad, argumentando que dar dinero a los rentistes no es la solución para resolver la crisis de la vivienda.
Por otro lado, la ministra Rodríguez ha criticado aquellas comunidades autónomas que no han aplicado la Ley de Vivienda en las zonas con mercados tensionats, ofreciendo recursos y colaboración para implementar las medidas necesarias, descartando que se retiren fondos en las comunidades que no cumplan.
