Diversas entidades ecologistas, como SOS Costa Brava y Amics de la Natura de Cadaqués, denuncian la sobresaturación de viviendas de lujo en el municipio. Alertan que esto pone en riesgo la identidad del pueblo y expulsa a los jóvenes, que no pueden acceder a viviendas asequibles. Critican el avance del nuevo POUM, que permitiría hasta 1.000 nuevas viviendas, y destacan tres casos clave: 158 pisos en huertos, la recalificación del campo de fútbol y el posible reinicio del proyecto en s’Aguarda.
El Ayuntamiento admite el problema pero dice tener poco margen de actuación debido a limitaciones legales y falta de recursos para frenar el urbanismo. Las entidades piden medidas fiscales, más vivienda pública y poner freno a la especulación para que Cadaqués no pierda su esencia.

