El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha anunciado un ambicioso plan para la construcción de 50.000 viviendas públicas hasta 2030, como parte de un nuevo programa de vivienda. Lo ha declarado durante el debate de política general, en el que calificó la situación de la vivienda como "insostenible". Illa se ha comprometido a invertir 1.100 millones de euros (MEUR) anuales en políticas de vivienda durante los próximos cuatro años, sumando un total de 4.400 MEUR. Ha destacado que ninguna otra comunidad autónoma ha realizado una inversión de esta magnitud.
Además de la construcción de viviendas, Illa ha anunciado un fondo de 500 MEUR destinado a la emancipación de los jóvenes, que se devolvería con el tiempo, y 500 MEUR anuales para ayudas a las familias en el pago del alquiler. Estas medidas forman parte de una estrategia más amplia para abordar lo que Illa considera un "reto de país" en materia de vivienda.
Medidas clave del plan de vivienda:
- Inversión en vivienda pública: Se construirán 50.000 pisos públicos hasta 2030, con una inversión de 1.100 MEUR anuales.
- Ayudas a la emancipación y apoyo a las familias: El Gobierno destinará 500 MEUR cada año para ayudar a los jóvenes a emanciparse y 500 MEUR adicionales en ayudas a las familias para pagar el alquiler. Estas ayudas se complementarán con la compra o alquiler de 1.700 viviendas de segunda mano para prevenir desahucios.
- Regulación de viviendas turísticas y de temporada: En coordinación con el gobierno español, se regulará el mercado de viviendas turísticas y el alquiler de habitaciones para evitar que esto influya en los precios de la vivienda residencial.
- Agilización de los procesos: Illa se ha comprometido a reducir el tiempo necesario para entregar viviendas protegidas, pasando de los actuales 100 meses a solo 50 meses. Además, ha propuesto la creación de un comité de agilidad urbanística para simplificar los trámites y una mayor colaboración con los ayuntamientos.
Apoyo al desarrollo de suelo:
El Gobierno impulsará una reserva pública de suelo con convocatorias anuales para ayudar a los municipios a disponer de suelo para nuevas viviendas. También se destinarán 500 MEUR anuales en financiaciones blandas para operadores públicos y privados que construyan viviendas de protección oficial, a través del Institut Català de Finances.
Con este conjunto de medidas, el presidente Illa busca dar un paso adelante en la emergencia habitacional que afecta a Cataluña y ofrecer una solución a uno de los problemas sociales más importantes de la actualidad.