La crisis de la vivienda en España ha acontecido una de las cuestiones sociales más preocupantes, según un informe del Banco de España. Aproximadamente el 40% de los hogares que viven de alquiler se ven obligadas a dedicar más del 40% de sus ingresos al pago del alquiler, superando el límite recomendado del 30%. Este problema es especialmente severo en las grandes ciudades como Barcelona, donde los precios del alquiler han crecido exponencialmente (un 33,2% entre 2015 y 2022) y el déficit de viviendas se calcula en 500.000.
Los colectivos más afectados son los jóvenes, los extranjeros y los parados, que suelen tener ingresos más bajos y, por lo tanto, menos capacitado para acceder a una vivienda. Los jóvenes, especialmente los de entre 16 y 29 años, son los más propensos a vivir de alquiler. En contraste, solo un 5% de las personas mayores de 65 años optan por el alquiler.
El Banco de España ha reclamado que se incremente el parque de vivienda a precios asequibles, y que se impulsen medidas para fomentar que los propietarios pongan sus viviendas en el mercado de alquiler. Esto incluiría reformas legales que estimulen el alquiler y ayudas para los colectivos más vulnerables.
A nivel estatal, las medidas anunciadas incluyen el Buen Alquiler Joven, y en Barcelona, una de cada tres hogares ya vive de alquiler. Girona, con un 24% del parque destinado al alquiler, también refleja esta realidad, poniendo de manifiesto la necesidad urgente de vivienda asequible.
Las cookies técnicas son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría sólo incluye cookies que garantizan las funciones básicas y funciones de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan información personal alguna.