Palafrugell: el epicentro de los pisos vacíos
Con 1193 pisos vacíos, Palafrugell concentra casi el 50% de todas las viviendas desocupadas del Baix Empordà. Estas se distribuyen de la siguiente manera:
- 640 viviendas en el núcleo urbano de Palafrugell.
- 553 viviendas en las localidades de Calella, Llafranc, Tamariu y Llofriu.
El Ayuntamiento considera vacías aquellas viviendas con un consumo de agua inferior a 5 m³ anuales durante dos años consecutivos. Sin embargo, los datos locales contrastan fuertemente con los registros de la Generalitat, que solo contabilizan 117 viviendas vacías en Palafrugell. Este desfase se debe a que el Registro de Viviendas Vacías únicamente incluye inmuebles adquiridos mediante ejecuciones hipotecarias o pagos de deuda, dejando fuera las propiedades de pequeños, medianos y algunos grandes propietarios.
¿Quién controla las viviendas vacías en Palafrugell?
De los 1193 pisos vacíos registrados por el municipio:
- 856 viviendas (71,75%) pertenecen a grandes tenedores, es decir, propietarios con más de cinco inmuebles.
- 401 viviendas están en manos de entidades bancarias y la SAREB.
- El 29,25% restante corresponde a pequeños y medianos propietarios.
Pese a identificar estas propiedades, el Ayuntamiento solo ha aplicado el recargo del 50% en el IBI a 250 viviendas de grandes tenedores, evidenciando dificultades para imponer sanciones efectivas.
Las entidades bancarias, principales actores
Los bancos y la SAREB concentran una gran parte de los pisos vacíos:
- Caixabank lidera con 46 inmuebles.
- La SAREB posee 30 pisos.
- BBVA y otros fondos de inversión suman el resto de los inmuebles desocupados en el municipio.
Estas entidades, junto con fondos de inversión como Blackstone o Cerberus, representan un desafío adicional, ya que muchas veces dificultan la gestión pública de estas viviendas.
¿Qué está haciendo el Ayuntamiento de Palafrugell?
El consistorio de Palafrugell ha impulsado medidas para movilizar las viviendas vacías, como el recargo en el IBI a grandes tenedores o la revisión de los consumos para identificar inmuebles desocupados. Sin embargo, estas iniciativas enfrentan importantes limitaciones:
- Falta de recursos administrativos para gestionar el gran volumen de inmuebles.
- Ausencia de mecanismos coercitivos efectivos para obligar a los grandes tenedores a poner las viviendas en el mercado.
Un problema estructural en toda Cataluña
La situación de Palafrugell refleja una problemática que afecta a toda Cataluña. Según el Idescat, en 2021 había más de 400.000 pisos vacíos en el territorio, de los cuales 76.000 estaban en las comarcas gerundenses. En contraste, la Generalitat ha anunciado la construcción de 50.000 viviendas nuevas, un esfuerzo insuficiente frente a las cifras de inmuebles desocupados.